Victoria Helena Ríos Fernández
La nieve no te detenga
Que hermoso es ver nevar
observar cómo los suaves cristales de hielo
caen uno encima a otro formando montañas de nieve.
Esas pequeñas partículas se agrupan
creando los copos de nieve
dejando un manto hermoso a todo su alrededor.
Es divertido jugar con ellos;
sentir en mis manos como desaparece,
esas pequeñas láminas en forma de estrella
van pintando el suelo.
El tapete blanco refleja la luz del sol
con brillos tenues.
Esta baja temperatura no impedirá
realizar actividades.
Así sea palear y abrir camino.
Salgo a ver el nuevo paisaje blanco
que deja en el camino.
Veo cómo cambia el paisaje
Aprovecho y tomo fotos para el recuerdo.
Ni el mal clima ni la nieve te detenga.
Forjando sueños
Encuentras un terreno baldío,
dejado a su suerte en el olvido.
El polvo y maleza lo cubre.
Es un paisaje poco prometedor.
Llega el arquitecto, se le ocurre una idea.
Mientras vemos un rastrojo,
el arquitecto ve una casa, una mansión, un edificio,
un centro comercial,
sus sueños los dibuja en el papel.
El ingeniero entiende lo que desea el arquitecto
calcula el sueño, identifica como lo va a hacer,
que necesita, cuanto material y de que clase.
Ingresa el constructor, comienza a hacer del entorno
todo lo que está en papel: planos y cálculos.
Organiza su equipo de trabajo para construir
Esa fantasía del arquitecto.
Con el ingeniero se logra convertir de la nada,
de una ilusión, de un dibujo,
los sueños de un proyecto volverlos realidad.
Quimera